Hallowen. -Parte 1

El 31 de octubre siempre ha sido un día bastante nulo. Hablo por mí, por supuesto:

De niño no le permitía a mi mamá disfrazarme, no pedía caramelos, no asustaba ni al perro, no veía películas de terror, nada de nada.

De chamo, una vez me invitaron a una fiesta que prometía ser la mega rumba prepúber del siglo. Yo para esa época era más pilas que ahorita y era de los chamos que más bailaba. No era salserín y tal, pero bailaba. Ilegales, Proyecto 1, Sandy Papo, toda esa vaina me encantaba. Hasta en la changa me defendía, gracias a un primo que me enseñó el paso de la bola de energía invisible a la altura del pecho. Yo estaba realmente entusiasmado y por primera vez en mi vida QUERÍA disfrazarme. Después de pensarlo casi toda la semana, opté por el hombre codorniz (El diario de Doug señores, por favor).

El día D me estuve preparando toda la tarde, practicando el merengue frente al espejo y eligiendo cuidadosamente las prendas adecuadas de mi clóset (hasta tenía un chaleco verde y una toalla roja que pretendía usar como capa!!!), para ser el mejor hombre codorniz que haya existido jamás. Poco antes de salir de casa vino mi papá y paseó su mirada desde la correa que tenía en mi cabeza hasta los interiores que estaban sobre mi short. Seguidamente me dijo con su voz más maldita sea: De verdad vas a ir a tu fiesta así??????

Padre 1 - Confianza en mí mismo 0

Terminé por vestir un blue jean viejo, un suéter negro bien mamarracho, un pasamontañas y llevar encima un bate de beisból del extranjero (como dice Rubén: "de esos que dicen ique Tony Armas"). Según yo, era un malandro.

Desde eso hasta ahorita, nada. Pero nada nada, así un nada inmenso, burda de lo feo. De vez en cuando una que otra fiesta o reunión pero nunca más me he disfrazado. Por alguna razón fui perdiendo progresivamente mis dotes latinos para la música tropical y bueno, estoy donde estoy (en salsa casino, con otros compañeros sin talento innato) . No es como montar bicicleta, se los juro.

Pero lo de hoy fue distinto. Desde temprano presentí que algo iba a suceder.

Y bueno, pasó algo.

Parte 2

Comentarios

Entradas populares